EL SENTIDO DE LA VIDA POR VICKTOR FRANK

La Logoterapia detecta los síntomas de Vacío Existencial y despierta en el ser humano, la responsabilidad ante sí mismo, ante los demás y ante la vida.

El sentido de la vida difiere de un hombre a otro, cada quien tiene una misión que cumplir y esta es única como es única la oportunidad de instrumentarla; sólo teniendo la capacidad y siendo responsable se descubre la esencia de la existencia, pero, ¿por qué, ante qué o ante quién se es responsable?, esto está marcado por la cultura, la sociedad y la religión. Como criaturas el verdadero sentido de la vida debe encontrarse en el mundo y no dentro del ser humano, porque el egoísmo es el virus que no nos deja progresar. El sentido de la vida siempre está cambiando pero nunca cesa, de acuerdo con la logoterapia, debemos descubrir este sentido de la vida en tres modos: 1. Realizando una acción; 2. Teniendo algún principio; y 3. Por el sufrimiento. El amor hace que el ser humano tome el impulso y reconozca sus potenciales para convertirlos en realidad, a la vez que hace lo mismo con otro ser humano. En cuanto al sufrimiento, de nada vale sufrir por las cosas materiales si este sufrimiento no me da salvación o me quebranta más, tenemos que sufrir por cosas maravillosas, por amor entre las más importante, por aquello que signifique necesidad y que siempre le quite el sufrimiento al otro; al aceptar el reto de sufrir valientemente, la vida tiene hasta el último momento un sentido y lo conserva hasta el fin. No hay que vivir atormentados por lo que ya paso o lo que se vendrá, lo correcto es estar siempre con actitud positiva, haciéndole frente a todo y con las esperanzas “full”, la actitud es lo que hace triunfar o a la vez fracasar.

Opino que el sentido de la vida está marcado por la actitud, la valentía y la “verraquera” que le ponemos a cada segundo de nuestra existencia, hacer que este pequeño instante por el que pasamos en la Tierra se convierta en siglos de experiencia, sonrisas y lágrimas bien aprovechadas y a la vez que se viva como si fuese la última oportunidad que se tiene para vivir. Estamos donde debemos estar y haciendo lo que debemos, de cada quien esta si lo hace con el mismo interés y la misma audacia. Que nos griten locos no es motivo de vergüenza, es razón de orgullo; y si nos critican, eso es envidia, pues algo se está haciendo bien.